Los casos más comunes entre mujeres jóvenes y adultas mayores que atiendo, son patologías asociadas al dolor lumbar (zona baja de la espalda) o molestias generales, y al analizar sus casos, la mayoría presenta trastornos hormonales, ovarios poliquísticos, úteros en posiciones variantes, aumento o pérdida de peso, intestinos irritados, hernias discales o abdominales, un estadio de embarazo o de post parto y trastornos tiroideos. Sí analizamos esta situación, es lógico que un alto porcentaje de las mujeres presentan estos síntomas y signos clínicos que acabé de describir. ¿Te sucede?.
Los ejercicios hipopresivos, lamentablemente sólo han sido asociados exclusivamente con el post parto, resulta que cuando este método es aplicado a cada paciente con la dosis adecuada, produce una relajación tónica del diafragma torácico, es decir una disminución de la actividad de las pequeñas fibras musculares posturales y
una normalización del tono de los músculos de las vías respiratorias y de la Faja Abdominal. Esto implica, a que tu faja abdominal y suelo pélvico funcionarán en todo momento sin que tengas que pensar constantemente en que debes contraer el abdomen y tener la postura perfecta, porque se dará de forma natural refleja.
He tenido pacientes que sienten un poco de temor, porque el trabajo es en apnea, sin oxígeno, pero se ha descubierto que cuando realizas trabajos respiratorios con disminución de oxígeno y un aumento parcial del dióxido de carbono (hipercapnia), tiene efectos positivos, tales como: mejoría del tono muscular donde pasas de una hiperpresión abdominal a una hipopresión, de aquí proviene su nombre de ejercicios hipopresivos. Es muy curioso el tema porque una persona muy fit u otra sedentaria, casi siempre presentan las mismas fallas en su faja abdominal y sistema respiratorio, la única ventaja es que la persona entrenada en la mayoría de las circunstancias presenta mejor consciencia corporal.